"Cada que te recuerdo, puedo verte claramente en aquella esquina, junto al teléfono, caminando de un lado a otro solo por mi, y puedo, casi casi, oler el perfume cercano por tus guantes y la chalina abandonándote para oler a mi... ".
Y después de eso, ya no quise recordar, y preferí sentarme a la ventana y dejar que la ciudad entera de un paseo dentro de mi.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por comentar.